8 cosas que ver en Roma y que tan siquiera sabías que existían

Todos los que hemos visitado Roma volvimos con nuestras instantáneas inmortalizando el Panteón, el Coliseo, la Fontana de Trevi (con o sin andamios, en mi caso con andamios, vallas y demás montaje), el monumento a Víctor Manuel II o la Piazza Navona que me enseñó que el síndrome de Stendhal es más real de lo que pensamos.

Sitios míticos que aparecen en toda guía de viajes que se tercie y en cualquier mapa turístico. Lugares emblemáticos casi de obligada visita aunque sea corriendo por las calles romanas.

Pero más allá de las aglomeraciones de turístas orientales cámara en mano, o ipad en los últimos tiempos, existen una serie de monumentos que han sido relegados a un segundo plano. Entre helado y helado estos son 8 propuestas que ver en Roma y que seguramente no conocías:

1. Templo de Portuno: En el foro original de Roma. Sobre un podio con fachada de carácter urbana que refleja uno de las características fundamentales de la arquitectura romana: la parte delantera será la que esté ornamentada mientras que la trasera se cerrará con un simple muro. Práctico y sencillo. Aparición de órdenes griegos, con el orden viene la proporción aunque no se muestra especial preocupación.

2. Muros Servianos: inmensos muros que abarcaban las 7 colinas de Roma. Construidos entre el 400 y el 200 aC conuna superficie intramuros mayor que la superficie de Atenas.Construidos como protección, gran parte desaparecerá y no volverán a construirse murallas en la ciudad hasta el final del Imperio.

3. Templo de la Fortuna Primigenia: a las afueras de Roma. Santuario de peregrinación reconstruido con un marcado carácter urbanístico fusionando elementos dispersos en un conjunto uniforme. Conjunto de bóvedas, gradas, dinteles y semicolumnas. El graderío sirve como una gran escalera monumental para el tholos que se encontraba en la parte más elevada. La ciudad ha llegado a ocultar en gran medida el templo, cuyos restos quedaron de manifiesto como consecuencia de los bombardeos estadounidenses de las posiciones alemanas en la segunda guerra mundial.

4. Pirámide de Cayo Cestio: original mausoleo en forma de pirámide. Las ideas están en continua circulación, en este caso la idea de eternidad llega desde el antiguo Egipto.

 

5. Tumba de Eurísaco: panadero proveedor del pan del Estado. En agradecimiento a todo lo que el pan le había dado, sobre todo a nivel económico mandó construir su mausoleo en forma de horno de pan.

6. Paso interior del arco de Tito: todos tenemos en mente el ya famoso Arco de Tito. Pero pocos saben que en su interior se encuentras unos relieves que con casi esculturas exentas. En disposición cóncava produce un efecto envolvente que te traslada a la escena que está teniendo lugar.

7. Columna de Marco Aurelio: casi como la prima fea de la columna de Trajano. Relieves más torpes y que copian escenas y las van repitiendo a lo largo del fuste. Figuras descompensadas, gestos del rosto exagerados… Aun así merece la pena la visita y buscar las diferencias con su antecesora.

8. Villa de Livia en Prima Porta: Livia fue la tercera mujer de Augusto. Actualmente se puede visitar en el Museo Nacional Romano y en su lugar original se han realizado réplicas que también se pueden visitar. Las paredes de la casa están totalmente pintadas con motivos vegetales, vallas pintadas e incluso animales representados de especies reconocibles, todo esto busca trasladar al visitante al medio de un jardín. Cuenta la leyenda que la villa contaba con un bosque de laurel del cual se sacaban las hojas para realizarlas coronas de los emperadores.