[dropcap]J[/dropcap]usto un año de antes de que el Himno de Riego sustituyera a la Marcha Real en España, en la vecina Italia nacía Giacinto Panella, más conocido como Marco Panella.
Político y periodista nunca se cansó de pelear por las luchas en las que creía aunque ello le ocasionara algún que otro problema con la policía.
Fundador y dirigente de los radicales italianos con solo veinticuatro años llegó a ser eurodiputado, de una Europa a la que aspiraba cambiar como muestra Medbridge, moviento para tender puentes entre Europa y Oriente medio.
Murió a los ochenta y seis años de edad, dando batalla a los dos tumores que le acompañaban desde hace tiempo, en hígado y pulmón pero que no le impedían seguir fumando como en los viejos tiempos.
Guerrero de los derechos civiles en Italia luchó por conseguir el divorcio en los sesenta y el aborto en los setenta, como en los noventa despenalizar el consumo de drogas blandas, lo que le llevó a problemas con la Justicia que no comprendió esa lucha, repartir canutos por Roma.
De una honestidad implacable, propios y extraños, enemigos y compañeros le tuvieron siempre un aprecio incalculable. Matteo Renzi tras enterarse lo ha definido como un “León de la libertad”, su compañera de luchas Emma Bonino en cambio constataba el hecho de que lo echarían de menos hasta sus adversarios.
Imprescindible para comprender la segunda mitad de la política del siglo pasado, la radio Radicale, fundada por él mismo le ha dedicado Requiem de Mozart.
Contra todo y contra todos, sin perder su civismo Giacinto ya vive para siempre, que la tierra le sea leve.
