Los CDR vuelven a provocar disturbios y atacar a la Policía en el aniversario del 1-O

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Una vez más el 1 de octubre se convierte en un día marcado por la violencia contra la policía en Cataluña. Este año, aunque con menos fuerza que en el pasado, los CDR han avasallado a los agentes desplegados en la zona.

Esta tarde el centro de Barcelona se ha llenado de varios centenares de jóvenes que se dedican a recorrer el centro de la ciudad como su particular forma de conmemorar el referéndum ilegal que tuvo lugar el 1-O de hace cuatro años. En este aniversario los CDR han convocado una manifestación bajo el lema ‘Ni oblit ni perdó’ (‘Ni olvido ni perdón’) y han hecho una marcha que comenzó a las 19:00 horas en la plaza de Francesc Macià, en la avenida Diagonal, desde donde se han dirigido hacia el centro de la capital cortando el tráfico en las principales arterias de la ciudad.

En estos momentos, los manifestantes están en plaza Urquinaona, una zona especialmente peligrosa en este tipo de fechas, como se pudo ver en las manifestaciones tras la sentencia del procés. Allí, varios grupos han comenzado a organizar barricadas y a quemar contenedores.

Vía Layetana también es un punto caliente, ya que allí está situada la Jefatura de la Policía, convirtiéndose en la diana perfecta para los manifestantes. Este año también se ha blindado la zona con un gran número de antidisturbios, pero esto no ha frenado a los CDR y manifestantes, que han acosado a los agentes con gritos contra la institución de la Policía y con el lanzamiento de distintos objetos como huevos y bolsas de basura estas últimas sacadas de los contenedores que han volcado y arrastrado por toda la calle.

Este año los participantes de la manifestación apuntaron también a la Delegación del Gobierno en Cataluña, situada en la calle Pau Claris, a la que han intentado entrar desde la calle Mallorca. Sin embargo, los Mossos d’Esquadra previeron el movimiento y acordonaron la zona de forma exitosa, impidiendo el asedio por parte de los manifestantes. Los jóvenes, al no poder acercarse al edificio han comenzado a cantar diversas consignas, algunas de ellas en contra de la Policía (“La policía tortura y asesina” o “Pim pam pum que no quede ninguno”), mientras que otras proclamas eran dirigidas a favor de la independencia y del rapero Pablo Hásel.

Por el momento los agentes de los antidisturbios de los Mossos (Brimo) se han desplazado con las furgonetas hasta los puntos donde habían incendiado contenedores o donde iban a ser incendiados de forma inminente y, tras momentos de tensión entre ambos bandos, han conseguido dispersar a la mayor parte de los manifestantes.

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